Preparandome para recordar

Soy socióloga.

Cuatro años de mi vida invertidos en poder entender qué es la sociología y para qué sirve, no me imagino qué pasará dentro de un año. Estoy con quienes menos imagine que pudiera estar, con dos nuevas amigas y socias que son como mis hermanas y qué estuvieron cuando yo más necesitaba, que me hicieron ver que no soy la única loca con sueños de cambiar el mundo y que, si te juntas con la gente adecuada, todo se arregla de alguna forma.

Conocí a una chava esplendida de futbol americano, bueno conocí a varías, pero una en especial que supe que iba a ser mi amiga en cuanto me di cuenta que con ella me sentía cómoda de ser yo misma, de hablar y callar, de ser tranquila y agresiva, de ser y vivir, una chava a la que quiero mucho.

De estar con mi mejor amigo, de convivir y compartir esas experiencias locas y qué a pesar de todo me ha mostrado que puedo contar con él, por qué al final del mi día, él es el que me ha mostrado que puedo realmente confiar en alguien.

¿Por qué no? También conocí gente que solo estuvo en mi vida unos cuantos días. A esas personas del primer año que parecieran tan lejanas. A maestros y maestras que creyeron en mi, y qué más de una ahora es también mi amiga. A esa gente que me odiaba, que les caía mal, que hablaron a mis espaldas y que se burlaban de mi, me alegro de que existan, realmente estoy haciendo bien las cosas si alguien me odia de esa manera o hace algo en plan de dañarme.

También conocí tal vez solo a una chica de mi salón que vale la pena conocer, alguien con quien pude compartir y deshacer esos miedos de sentirme completamente sola, porque en sus palabras y nuestras conversaciones pude sentir que esa alegría de tener una amiga, y que latía una clase de afecto y que es una gran persona.

También me siento bien con esos pequeños romances que me llegaron a conocer por unos cuantos días o por unos cuantos años, ya que sin ellos no entendería lo importante que es arriesgarse a hacer las cosas y entender que todo se acaba para bien o para mal.

¿Lo volvería a repetir?

No lo sé, hubo muchos errores que quisiera corregir, desearía haber conocido a varios desde tiempo antes, pero al final esto no es un ensayo, no hay conclusiones y solo se puede seguir sobre la marcha.

Se acaba esto, se acaba esa forma de vida y comienzan peores retos y riesgos. (suena a nuevo tatuaje)

A veces solo quisiera cerrar mis ojos y encontrar a dónde pertenezco, recordar esa comodidad de dormir en las canchas de la prepa, o sentirme volar en los columpios con una amiga, llorar en la biblioteca con mi hermana sol, caminar en la bahía en el atardecer sin pensar que hacer mañana porque simplemente estás con él, correr bajo la lluvia con el equipo de futbol, o llorar de alegría cuando terminas tu trabajo mientras duermes sola en una cama dura y llena de mosquitos con techo de lámina y a lado de ti un pollo. Cuando recuerdas esa copa de vino tinto con tu mamá o cuando recuerdas que tu abue te acompaño cuando más fiebre tenías. Cuando recuerdas que caminabas sobre un puente peatonal en el atardecer más bello y segundos después pierdes la conciencia. Cuando terminas tu diplomado qué no creías que nunca acabaría porque te sentías tan sola y te das cuenta que sola es cuando más puedes. Cuando firmas para tener una asociación civil con tus amigas, cuando tienes tu primera oferta de trabajo.  Cuando te tatúas algo nuevo.

Todo pasa…

Todo acaba…

¿Nos volveremos a ver?

En 5 años.